El disco "Capítulo I: INCHE" es el primero de una tetralogía fonográfica, en la que se relata el camino del ser humano desde la cosmovisión mapuche, desde la creación de lo natural hasta el ascenso de este hacia el firmamento. Un trabajo de exhaustiva investigación realizado por Chaicura, cuyo objetivo es dar a conocer parte de la tradición cultural del pueblo mapuche a través de la música. Cada canción intenta entretejer desde la lírica, la rítmica y los timbres el relato mítico, histórico y experiencial del mapuche, abordando asuntos antropológicos vistos mediante su propia perspectiva étnica: ciclo vital, vida en comunidad, filosofía, religión, entre otros. Descrito de manera muy escueta, en esta primera etapa, la banda aborda el mito creacionista mapuche desde el Ñitholpeyum (el principio), primer track del disco. Composición instrumental que simula el avance de los elementos constituyentes del universo hacia la formación del mismo, el “caos” desde lo anterior a lo constitutivo de lo natural. A partir del Trufken (estallido/ceniza), segundo track, es que se forma todo lo existente en el mundo material y, por tanto, la figura humana en lo terreno. Aquí comienza el camino del Inche (yo/ yo soy), tercer track, donde el ser se descubre a sí mismo, adquiere conciencia y asume su rakidwam (inteligencia/razón). Kizungünewün (independencia/autonomía), cuatro track, es la etapa de autodeterminación y responsabilidad del mapuche, relativo a su adolescencia. Kupalen (ir y venir), quinto track también instrumental, es la referencia a la conexión entre el pasado y el futuro a través del inche, es decir, el reconocerse como un ser condicionado por lo que le antecede y lo que le depara. Küpal (descendencia/familia), sexto track, se desarrolla en la adultez, y refiere a la madurez de considerar lo que hubo antes para no errar en lo que sigue, dentro del propósito existencial del mapuche. Kimün (sabiduría), séptimo y último track, es propio de la vejez y avidez hacia el siguiente advenimiento luego de la muerte.